Los errores ortográficos más comunes
Imagina que acabas de hacer tu currículum. O una carta de presentación. Orgulloso, lo envías a la persona responsable de selección porque consideras que tienes el perfil que buscan. La persona que lo recibe, lee tu currículum y se queda impresionada. Es justo lo que buscaban. Entonces, procede a leer la carta y… lo siguiente es un mensaje agradeciendo tu candidatura pero declinando ofrecerte un trabajo. ¿Qué ha pasado? A menudo, los errores ortográficos se cometen sin darnos cuenta, y pueden ser el tener o no tener trabajo; el aprobar o no una asignatura; o incluso el dar una buena imagen.
Antiguamente, los que de verdad eran considerados «escritores» sabían escribir y no tenían nunca una falta de ortografía. Pero hoy día puedes encontrarte con libros publicados, bien por un mismo autor o por editoriales, que tienen errores ortográficos habituales. ¿Y cuáles son estos? Pues hoy te hablamos de todos ellos. ¡Así aprenderás a no cometerlos!
Errores ortográficos habituales: ¡No los cometas!
Ya sea en un trabajo, un examen, una carta de presentación o en cualquier texto que se precie, si no quieres dar una mala imagen, no solo tienes que cuidar los detalles del papel, la forma en que está escrita o el texto. También que este no tenga errores ortográficos.
Y, para eso, debes conocer cuáles son los habituales que se cometen para que no te pase. Así que toma nota.
La coma separadora
Esto es un error muy habitual. Si bien es más normal verlo en textos escritos por latinoamericanos, lo cierto es que también en España estamos cogiendo esta manía, y hay que erradicarla como sea. Desde pequeños nos enseñan que las frases tienen un sujeto y un predicado. Son, de alguna forma, una pareja. Y muchos se empecinan en separarlos con una coma.
Por ejemplo:
La receta del roscón de nata, es una de las mejores de España.
La frase es bonita. Salvo por esa coma separadora que mata todo el conjunto. ¿Lo correcto?
La receta del roscón de nata es una de las mejores de España.
Sin comas. Porque no puedes separar un sujeto de un predicado, es algo que queda mal.
¿Dónde anda la tilde?
Otro de los errores ortográficos habituales a la hora de escribir es obviar que los pasados llevan tildes. Pues sí. Además, tienes que recordar que los verbos en pasado suelen ser palabras agudas porque terminan con el acento en la última sílaba. Y ya sabemos que las palabras agudas siempre llevan tilde si terminan en -n, -s, o vocal. Así: miró, parpadeó, hablé, besé, asentí, subyugué… van a llevar tilde. SIEMPRE.
El hecho que te va a echar
Divertido, ¿verdad? Pero a lo mejor no es tanto si significa que tienes o no un trabajo. Porque sí, parece que «hecho» y «echo» es lo mismo, pero en realidad no es así.
Por ejemplo:
Hechos los deberes / Echo los deberes
Lo único que diferencia esas dos frases es la «h» (y la ese que le falta a «echo»), ¿a que sí? Sin embargo, el significado de ambas oraciones son diferentes.
- Por un lado, «Hechos los deberes» significa que has terminado una tarea que tenías, es decir, del verbo hacer.
- Por otro lado, «Echo los deberes» significa que has «tirado» los deberes. En otras palabras, que los has «echado» a la basura, a la papelera, que los has lanzado…
Como ves, no significa lo mismo. Y sin embargo, es una de los errores ortográficos más habituales que se cometen.
Errores ortográficos: Sobretodo / Sobre todo
Antes, la RAE dejaba que utilizaras el sobretodo, porque entendía que debía escribirse junto. Ahora, hay que escribirlo separado. Y es porque el sobretodo es en realidad un sinónimo de abrigo. Y si lo usas en la frase, por ejemplo:
Me gusta sobretodo de vainilla…
La gente va a pensar que tienes un abrigo color vainilla, pero no que lo que quieres es indicar que, especialmente, te gusta el de vainilla.
Así que siempre que quieras poner cualquier cosa que no sea un sinónimo de abrigo, irá separado.
El aparte que no va «de parte a parte»
Otro de los errores ortográficos habitual, y de hecho se ve hasta en escritores ya consagrados, es escribir aparte separado; es decir «a parte». Pues bien, aunque la palabra significa «separar», lo cierto es que escrita se debe poner todo junto.
Ahora bien, hay otros «a parte» que a lo mejor sí que van separados, pero porque la palabra en sí no significa lo mismo que la de aparte. Son dos palabras que actúan por sí solas.
Errores ortográficos: Porque, por qué, el porqué, por que
No nos hemos trabado, pero es que en realidad hay cuatro porques, o por ques, o porqués. Y cada uno es diferente y su uso por tanto es de una determinada forma. ¿Cómo sabes cuál utilizar? Pues:
- Por qué: suele usarse en oraciones interrogativas, pero no quiere decir que siempre haya que usar los signos de interrogación para ponerlo, también puede ser indirecta. Por ejemplo: ¿Por qué no me has llamado? / Quiero saber por qué no me has llamado.
- Porque: suele ser la respuesta a lo anterior. ¿Por qué has hecho una cosa? Porque… Lo que hace es dar sentido a una frase que va a explicar algo.
- Porqué: esta siempre suele estar acompañada de un artículo determinado o indeterminado. El porqué, un porqué… ¿Y qué significa? Pues podrías cambiarlo por «el motivo». Por ejemplo: no sé el porqué de su actitud (no sé el motivo de su actitud).
- Por que: al igual que te decíamos antes, con lo de aparte y a parte, el por que aparte y sin acentuar se refiere a dos palabras diferentes que actúan de otra forma que no como pensamos.
Errores ortográficos: El punto «de sobra» tras una interrogación o exclamación
Seguro que más de una vez te has dado cuenta de esto. O tú mismo lo has hecho. Se trata de poner una frase entre interrogaciones o entre exclamaciones y justo después de cerrarlas colocar un punto. Tal que así:
¿Dónde dices que va a llover?.
¡Madre mía, cómo está la niña!.
Pues que sepas que es una falta de ortografía grave. Porque el propio punto de la interrogación final y exclamación final ya actúa como punto. No hace falta ponerle más. Ahora bien, otro de los grandes problemas que surgen es cuando, en una frase, se pone una interrogación o exclamación y se empieza con mayúscula porque se cree que ese punto del inicio es un punto y final. Algo así:
Si quiero, pero ¿Por qué tengo que ponerme esto?
De nuevo nos encontramos con uno de los errores ortográficos más habituales, porque en este caso, ese punto de ¿ o de ¡ no significa un punto y final. Es un punto sin más, no actúa para que tengas que poner mayúsculas.
Así, sería: Si quiero, pero ¿por qué tengo que ponerme esto?
Y ya el colmo sería cometer «dos en uno»:
Si quiero, pero ¿Por qué tengo que ponerme esto?.
Así que anótalo bien. Eso NO se hace.
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