El Silmarillion
El Silmarillion es una compilación de historias interrelacionadas de fantasía épica creadas por el escritor británico J. R. R. Tolkien. Fue escrito a lo largo de varias décadas y publicado póstumamente en el año 1977 por el hijo del autor, Christopher Tolkien. El título hace referencia a los Silmarils, tres hermosas joyas cuya historia se relata en el libro, las cuales se relacionan con otros acontecimientos que se narran a lo largo de este.
La obra consta de cinco partes que describen y relatan el surgimiento de los territorios y las distintas criaturas que conforman el vasto universo que el escritor creó para El Hobbit y El Señor de los Anillos, así como luchas por el poder entre las fuerzas del bien y el mal. La última de estas cinco partes, titulada La Historia de los Anillos de Poder y la Tercera Edad, guarda relación directa con los hechos narrados en las dos novelas mencionadas. Estas obras se encuentran entre las mejores sagas de libros del mundo.
Una publicación tardía de un inicio
Su publicación llegó una vez El Señor de los Anillos había alcanzado ya gran popularidad a nivel mundial. Muchos lectores y críticos lo consideran la obra más compleja de Tolkien en tanto contiene las mitologías e historias que fundamentan todo el entramado mundo ficticio creado por el escritor.
Sobre el autor
John Ronald Reuel Tolkien, mejor conocido como J. R. R. Tolkien, fue un filólogo, catedrático y escritor británico nacido en Bloemfontein (hoy en día territorio sudafricano) en el año 1892. Durante su infancia se estableció en Birmingham, Inglaterra, junto a su madre y hermana. Fue un destacado especialista en filología y lengua inglesa, y estudioso de diversas lenguas.
Su experiencia como oficial británico en la Primera Guerra Mundial, su fervor hacia la religión católica, su interés en la filosofía y las mitologías europeas, así como sus vastos conocimientos en lingüística influenciaron y enriquecieron su obra de fantasía. Alcanzó la fama mundial en los años subsiguientes a la publicación de El Señor de los Anillos, en la década de 1950.
Además de esta novela, es el autor de Roverandom, El Hobbit, El Silmarillion, La historia de Kullervo, Cuentos Inconclusos de Númenor y la Tierra Media, Historia de la Tierra Media y otros cuentos y poemas. Fue además profesor de la Universidad de Oxford y el Merton College.
Se casó con Edith Mary Bratt y tuvieron cuatro hijos juntos. Murió en Bournemouth, Inglaterra, en el año 1973, dejando parte de su obra inconclusa. Esta fue reunida, editada y publicada en años posteriores por su tercer hijo Christopher John Reuel Tolkien.
La creación de Arda, sus mitologías y la lucha del bien contra el mal
El Silmarillion escenifica la creación del universo nombrado Eä, por parte del dios supremo Ilúvatar, también llamado Eru. Este dios también creó a los Ainur, otras deidades que dieron forma a Arda, el mundo habitado por elfos, hombres y el resto de las criaturas.
Durante la creación de Arda, uno de los Ainur, llamado Melkor, comenzó a corromper las obras y otras deidades creadas por Eru, desencadenando así la oposición entre el bien y el mal. Esta dicotomía es uno de los temas principales de toda la literatura de Tolkien.
En la parte central y más densa de El Silmarillion se narra cómo, durante la Primera Edad, un poderoso rey elfo del clan Noldor llamado Fëanor, crea los Silmarils, tres gemas preciosas que contenían la luz del mundo. Los Silmarils fueron robados por Melkor desatando una serie de eventos y luchas que involucran a los elfos, los hombres, los enanos, los dioses, etc.
Hacia el final del libro se relatan las circunstancias de la creación y pérdida del anillo único por parte de Sauron, una deidad llena de maldad y antiguo aliado de Melkor. Sauron engañó a los elfos y logró forjar el objeto que representa el argumento central de El Señor de los Anillos, empalmando así los hechos de El Silmarillion con los de esta novela. Para los amantes de la literatura, este libro es obligatorio leerlo, es una de las mejores obras de fantasía de la historia humana.
El Silmarillion se divide en cinco partes
- Ainulindalë.
- Valaquenta.
- Quenta Silmarillion.
- Akallabêth.
- La Historia de los Anillos de Poder y la Tercera Edad.
Estas partes están a su vez conformadas por diversos relatos entre los que se destacan “La historia de Beren y Lúthien”, “Del viaje de Eärendil y la Guerra de la Cólera”, “La música de los Ainur”, “La caída de Gondolin”, “Los hijos de Húrin”, entre otros.
Desarrollo de la trama y estilo narrativo
Narrador omnisciente y distante
Al igual que en la mayor parte de las narraciones escritas por Tolkien, en El Silmarillion nos encontramos con un narrador omnisciente que poco a poco, y recurriendo a profusas descripciones, va revelando al lector situaciones, hechos, personajes, lugares y motivaciones.
Sin embargo, en comparación a sus novelas más populares, El Hobbit y El Señor de los Anillos, el tono de la narración es más serio y distante, lo cual contrasta con la grandilocuencia de los sucesos que se relatan.
El trabajo de toda una vida
El Silmarillion está conformado por historias interconectadas entre sí, que fueron redactadas en distintos momentos de la vida de su autor. Este comenzó a esbozar la obra a finales de la década de 1910, tras haber sido dado de baja del ejército británico por enfermedad en la Primera Guerra Mundial. Fue trazando, reescribiendo y editando tanto relatos como personajes en intervalos hasta la década de 1960.
Este hecho resultó en que haya algunas partes del libro más detalladamente narradas y descritas que otras, también en que haya historias elaboradas en un tono más filosófico y complejo. Además existen algunas pequeñas discrepancias en relación a personajes secundarios que aparecen en distintos momentos de El Silmarillion y El Señor de los Anillos.
Christopher Tolkien compiló, editó y completó los relatos y bosquejos de su padre para El Silmarillion (y también de otros libros en torno a la cosmogonía de Eä y La Tierra Media), por supuesto, con la ayuda del escritor canadiense Guy Gavriel Kay. De esta manera finalizó el largo e intrincado proceso creativo de la obra.
Sin embargo, todas estas circunstancias no menoscaban la calidad y profundidad de El Silmarillion como libro fundacional del mundo fantástico creado por Tolkien. Se trata, en todo caso, de una especie de biblia atemporal para los lectores y fanáticos del trabajo del escritor británico, así como de la literatura de fantasía en general.
Referencias a diversas mitologías y la literatura clásica
La inspiración de Eä junto a todas sus deidades y personajes podemos encontrarla en la mitología nórdica, celta y griega, así como en las epopeyas y cuentos fineses y anglogermánicos antiguos. Estas referencias las podemos encontrar tanto en los personajes principales como en los distintos dialectos y vocabularios ideados por Tolkien para los diferentes clanes y razas.
También tiene reminiscencias a la biblia judeocristiana en su estructura y, podría afirmarse, en la oposición entre Eru y Melkor. Este último es una especie de Lucifer originario del coro del dios supremo y corrompido por sus ansias de reinar.
Asimismo, refiere a clásicos de la literatura, por ejemplo a Shakespeare. La historia de Beren y Lúthien está inspirado en el cuento galés Culhwch y Olwen, y también contiene elementos que la asemejan a Romeo y Julieta. A su vez inspiró la historia de amor de Aragorn y Arwen, personajes de El Señor de los Anillos.
Personajes
Eru o Ilúvatar
Es el dios supremo y creador de los Ainur, a quienes forjó desde su pensamiento. No tiene forma física ni rasgos que se puedan describir. Además creó Eä, el universo. El resto de las cosas no fueron moldeadas directamente por él, sino por las deidades que creó. Es una clara alusión al dios padre de la religión judeocristiana.
Melkor o Morgoth
Es la deidad más poderosa creada por Eru. Fue la voz disonante en el coro de los Ainur instaurado por el dios supremo y es el principal antagonista durante la mayor parte de El Silmarillion.
Durante la creación de Arda, ambicionó reinar sobre todo como el Señor Oscuro. Generó diversas confrontaciones y fue encadenado. Posteriormente robó los Silmarils, forjados por el elfo Fëanor, y desató un sinnúmero de desgracias. Es el padre de todo el mal, que persiste en el mundo aún después de su muerte.
Fëanor
Es un príncipe y posteriormente rey elfo del clan de los Noldor. Fue influenciado en un principio por Melkor y condenado a pasar 12 años en el destierro por desafiar a su hermano.
Es sumamente inteligente y un destacado orfebre. Forjó los Silmarils a partir de la luz de los árboles de Valinor, cuando la araña Ungoliant destruyó estos últimos. Cuando los Silmarils fueron robados, juró recuperarlos y dar su vida si fuese necesario.
Ungoliant
Es una araña gigante y monstruosa, siempre hambrienta de luz, que se alía con Melkor. Junto a este, envenenó y destruyó los dos árboles de Valinor, Telperion y Laurelin, los cuales eran la fuente de luz del mundo antes de la existencia del sol y la luna. Posteriormente se separó de Melkor, a raíz de su codicia por los Silmarils, y engendró un clan de arañas temibles que envenenaron diversos territorios.
Sauron
Es el más poderoso de los sirvientes de Melkor y hereda sus ansias de poder y de ser llamado el Señor Oscuro cuando este es desterrado y muerto. Es también uno de los ainur. Puede cambiar de forma a voluntad, habilidad de la que se vale para engañar a los elfos y a muchas criaturas. También es un poderoso nigromante y herrero. Incitó a la creación de los anillos de poder por parte de los elfos y forjó el anillo único en el Monte del Destino.
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