Dostoyevsky. Frases de sus obras en el aniversario de su fallecimiento

Dostoyevski. Detalle del retrato de Vasily Perov.

Fiodor Dostoyevsky es considerado no solo uno de los mejores escritores rusos que existieron, sino uno de los mejores de todos los tiempos. Fallecía un día como hoy de 1881 en San Petersburgo. Su obra abordó como nadie las realidades sociales y políticas de la Rusia zarista más complicada. De hecho, fue condenado a muerte en 1849 por revolucionario y, poco antes de la ejecución, el zar Nicolás I le conmutó la pena por varios años de trabajos forzados. Estar esperando la muerte durante días lo marcó profundamente e influyó en su carrera como escritor.

Los hermanos Karamazov, El idiota, Crimen y castigo o El jugador son referentes de la literatura más fundamental del siglo XIX por ser ejemplos del profundo conocimiento de Dostoyevsky de la psicología humana. En ellos creó personajes que reflejaban lo más brillante y también lo más oscuro del alma. Estas son algunas frases escogidas de esos títulos para recordarlo en esta fecha.

Crimen y castigo

  • Sólo se vive una vez, y yo no quiero esperar esa felicidad universal. Ante todo, quiero vivir. Si no sintiese este deseo, sería preferible no tener vida.
  • La razón es esclava de la pasión.
  • En nuestros días, el dinero es la más dulce de las mieles.
  • Todo lo que es útil a la humanidad es noble.
  • La pobreza no es un vicio.

El idiota

  • La compasión es la principal y acaso la única ley de la existencia humana.
  • La experiencia es decisiva y demuestra que no se puede vivir aprovechando cada instante. Es imposible.
  • Lo que el dinero tiene de más vil y despreciable es que incluso proporciona talentos.
  • Si no muriese. Si me devolviesen la vida. ¡Qué eternidad se abriría ante mí! Transformaría cada minuto en un siglo de vida; no despreciaría ni un solo instante y llevaría cuenta de todos los minutos para no malgastarlos.

Los hermanos Karamazov

  • ¡Que el diablo se lleve a todos estos hombres de cara modelada por los siglos y que sólo llevan dentro charlatanismo y falsedad!
  • Quien se miente y escucha sus propias mentiras llega a no distinguir ninguna verdad, ni en él, ni alrededor de él.
  • El hombre inventó a Dios. Pero no es eso lo extraño, ni tampoco es prodigioso que Dios existiera realmente; lo extraño es que semejante idea haya podido surgir en el cerebro de un animal tan feroz y maligno como el hombre ya que es una idea tan sagrada, tan conmovedora, tan profundamente sabia y que tanto honra al hombre.
  • Mi opinión es que si el diablo no existe, si ha sido creado por el hombre, este lo ha hecho a su imagen y semejanza.
  • Hay tres fuerzas, tres únicas fuerzas en la tierra capaces de vencer y cautivar para siempre la consciencia de estos débiles rebeldes, para su felicidad. Son: el milagro, el misterio y la autoridad.

El jugador

  • Francamente, no veo nada sucio en el deseo de ganar lo más posible y cuanto antes.
  • Por ridícula que parezca mi gran confianza en los beneficios de la ruleta, más ridícula aún es la opinión corriente de que es absurdo y estúpido esperar nada del juego. ¿Y por qué el juego habrá de ser peor que cualquier otro medio de procurarse dinero, por ejemplo, el comercio? Una cosa es cierta: que de cada ciento gana uno. Pero eso ¿a mí que me importa?
  • En aquel instante debí haberme retirado, pero una sensación extraña se apoderó de mí: un deseo de provocar al Destino, de gastarle una broma, de sacarle la lengua. Arriesgué la mayor cantidad autorizada, cuatro mil florines, y perdí… Entonces, aturdido dejé la mesa.
  • Hace tiempo que ignoro lo que ocurre en el mundo, en Rusia o aquí… Usted sabe muy bien que es lo que absorbe mi mente. Puesto que no guardo la más mínima esperanza y a sus ojos soy una nulidad, le diré con franqueza: solamente a usted la veo. Y lo demás me tiene sin cuidado. Yo mismo no sé por qué la amo así.


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