Legado en los huesos
Frase de Dolores Redondo.
Dolores Redondo es una de las autoras de moda en la esfera literaria española en la actualidad. Ella se ha hecho famosa entre el público literario hispanoparlantes gracias a su Trilogía del Baztán. No en vano, la notoriedad de la autora donostiarra ha conquistado a lectores en otros idiomas debido —en buena medida— a títulos como Legado en los huesos (2013).
Esta novela negra ha sido traducida a veintidós idiomas hasta la fecha. Al igual que la entrega predecesora de la aludida trilogía (El guardián invisible, 2013), Legado en huesos ha sido adaptada al cine (2019). La película cuenta con un elenco estelar encabezado por Marta Etura, Leonardo Sbaraglia y Álvaro Cervantes, bajo la dirección de Fernando González Molina.
Legado en los huesos en palabras de su autora
Una trilogía contada de forma no lineal
En una entrevista concedida a Patricia Tena y Jordi Milian en 2013, Dolores Redondo reveló percepción con respecto a la novela. De acuerdo con la escritora española, “en El guardián invisible Amaia sufre un fuerte estrés postraumático, pero no profundizábamos sobre qué lo había causado… En Legado en los huesos contamos qué ha originado ese miedo”.
Redondo también reafirmó la importancia de “escribir con honestidad” con la finalidad conmover los lectores a través de una narración ficticia. En ese proceso creativo ella afirmó que exploró sus propios miedos para ser capaz de transmitir emociones fidedignas. Adicionalmente, la autora consiguió aumentar la sensación de agobio de la protagonista a causa de su inminente maternidad al inicio del libro.
Las figuras mitológicas
En El guardián invisible el monstruo sospechoso del horroroso homicidio descrito al inicio de la trilogía es Bassajaun. Esa misma tendencia continúa en Legado en huesos con la supuesta aparición de Tarttalo, un cíclope sediento de sangre. Al respecto, Redondo explicó que los seres mitológicos son intrínsecos de la cultura y de los cultos religiosos anteriores a la llegada del cristianismo del País Vasco.
Un desarrollo repleto de sub-tramas
La densidad y profundidad de la narración es un sello distintivo de los tres libros del Baztán (así como en la precuela de la trilogía, La cara norte del corazón). En este sentido, la complejidad es consecuencia directa de las abundantes microhistorias propias de cada personaje. De esta manera, Redondo consiguió armar una historia muy entretenida e intrincada, en donde cada detalle cuenta.
En añadidura, la escritora vasca cree que el paisaje navarro constituye una especie de carácter en sí mismo, capaz de influir en el lector y en todos los participantes de la novela. Aunado a esto, Redondo aprovecha este libro para exponer aspectos como “la violencia machista o las dificultades para conciliar vida laboral y familiar que tenemos especialmente las mujeres”.
Resumen
Planteamiento inicial
Un año después de los sucesos narrados en El guardián invisible, la inspectora Amaia Salazar se presenta en el juicio en contra de Jason Medina. Este último se hizo pasar por Bassajaun con el objetivo de despistar a las autoridades tras cometer el asesinato de su hijastra, Johana Márquez.
No obstante, el proceso debe suspenderse de forma inmediata cuando el acusado aparece muerto junto con una nota de suicidio dirigida a Amaia que reza “Tarttalo”. En consecuencia, los dirigentes de la policía de San Sebastián se ven forzados a solicitar el apoyo de su mejor especialista en este tipo de casos insólitos, Salazar.
Un nuevo caso terrorífico
A la inspectora no le queda más remedio que ponerse a la cabeza del cuerpo de investigación, a pesar de su embarazo en fase avanzada. Como si esto fuese poco, la secuencia de acontecimientos la obliga a rememorar algunos incidentes de su infancia (con los cuales tiene algún trauma). Entonces, la sub-trama del pasado de Salazar se une con los eventos del presente.
Uno de los miedos latentes de Amaia tiene que ver con la perturbadora conducta de su madre. Por este motivo, Salazar intenta no repetir los comportamientos de su progenitora con tal de no fallarle a su hijo. En este punto, se hace evidente la dificultad de la protagonista para compaginar su trabajo con su vida familiar, lo cual, se convierte en una lucha interna persistente en toda la novela.
¿Mito o realidad?
A medida que Amaia coteja su pasado con el presente, ella comienza a dilucidar un hecho difícil de creer: lo sobrenatural forma parte de su vida. De igual forma, los personajes secundarios completan el panorama de una protagonista que debe aprender a confiar nuevamente en quienes le rodean. Igualmente ocurre con la aceptación de la magia que la acompaña desde su niñez.
Crítica
Los méritos de Dolores Redondo
Sin lugar a duda, la autora donostiarra ha demostrado una excelente documentación al momento de escribir Legado en huesos a través de sus ambientaciones. De hecho, los escenarios sombríos descritos de forma minuciosa constituyen un rasgo narrativo (común en toda la trilogía del Baztán) muy efectivo para enganchar a los lectores.
Imagen de la escritora Dolores Redondo.
En paralelo, la profundidad psicológica de la protagonista y de los personajes complementarios termina de armar un relato muy consistente. Del mismo modo, los diálogos son muy concisos y, al mismo tiempo, cuentan con la amplitud descriptiva necesaria demandada por los abundantes detalles expuestos en la novela.
¿Deméritos?
En algunos portales literarios aparecen comentarios negativos sobre la Trilogía del Baztán. La mayoría de ellos tiene que ver con la aparición de cuestiones fantásticas (fantasmas, el tarot, acaecimientos paranormales…) en medio de una trama policial. Sin embargo, ¿lo sobrenatural es ajeno a una trama de novela negra?
En cualquier caso, la historia no deja cabos sueltos ni elementos colocados al azar o reflexiones innecesarias. Todo tiene una razón de ser (incluyendo las interrogantes cuya resolución no obedece a una explicación lógica o científica). Por consiguiente, este libro es —más allá de su notable éxito comercial— un representante destacado de la novela negra española del siglo XXI.
Sobre la autora, Dolores Redondo
Dolores Redondo.
Dolores Redondo es oriunda de San Sebastián; nació el 1 de febrero de 1969. Si bien se dedicó a escribir desde su adolescencia, optó por otras carreras durante su juventud. Específicamente, decidió estudiar Derecho —aunque no culminó la licenciatura— en la Universidad de Deusto y Restauración Gastronómica en su ciudad natal.
Sus primeros escritos formales fueron relatos cortos y cuentos para niños, hasta la aparición de Los privilegios del ángel (2009). En su novela debut, Redondo demostró los primeros rasgos de una narración llena de descripciones vívidas en medio de escenarios marcados por la tragedia y los traumas infantiles. Dichos rasgos son palpables en la protagonista de la Trilogía del Baztán, Amaia Salazar.
Los libros de Dolores Redondo
- Los privilegios del ángel (2009)
- Trilogía del Baztán
- El guardián invisible (2013)
- Legado en los huesos (2013)
- Ofrenda a la tormenta (2014)
- Todo esto te daré (2016)
- La cara norte del corazón (precuela de la Trilogía del Baztán, 2019).
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