Alicia Vallina. Entrevista con la autora de Hija del mar
Alicia Vallina sabía bien de lo que escribía cuando en abril de 2021 publicó su primera novela titulada Hija del mar. Y es que fue directora técnica del Museo Naval de San Fernando-Cádiz y también ha escrito muchos artículos en revistas nacionales e internacionales sobre Museos, Historia de España, Historia Naval, Arte Contemporáneo y Patrimonio Cultural. Le agradezco mucho su atención y tiempo dedicados para esta entrevista, la última del año, donde nos habla de esta novela y de muchos temas más.
Alicia Vallina — Entrevista
- ACTUALIDAD LITERATURA: Tu novela, Hija del mar, nos cuenta la historia de Ana María de Soto. ¿Quién fue y cómo la encontraste para escribir sobre ella?
ALICIA VALLINA: Hija del mar es la historia de una mujer real, una mujer de carne y hueso nacida en un pequeño pueblo del interior de Andalucía, Aguilar de la Frontera (Córdoba) que, en 1793, nada más y nada menos, decide romper con todo y hacerse pasar por hombre para alistarse en la Armada española. Desde luego fue una mujer única en su tiempo que tuvo que hacerse valer en un mundo de hombres, en el que cualquier paso en falso podía costarle la vida. Una mujer de enorme valor y un alto grado de inconsciencia, que creo merece ser recordada. Pero no olvidemos que se trata de una novela y que hay partes que no son reales, o, al menos, que hayamos podido constatar.
Por otra parte, yo siempre creo que son las grandes historias las que nos acaban por encontrar a nosotros. Se nos presentan de modo casual, aunque debemos tener siempre los ojos bien abiertos y la curiosidad suficiente para hacerlas nuestras. Y así fue como sucedió con Hija del mar. Yo había sido designada como directora técnica del Museo Naval de San Fernando, en Cádiz. Antes estaba ubicado en la Escuela de Suboficiales (al lado del Panteón de Marinos Ilustres, que también se mencionó en la novela).
Mujeres en la Marina
Me sorprendió especialmente que en todo el discurso del museo no hubiera ninguna mención ni referencia a mujeres que, de un modo u otro, hubieran contribuido a forjar la historia naval española, o más concretamente la del departamento marítimo de Cádiz, punto de referencia del propio museo que iba a dirigir. Por eso me propuse, en un principio, y únicamente desde el punto de vista de la investigación (pues nunca había escrito novela y sí muchos ensayos sobre museología y patrimonio cultural y militar), dar a conocer la historia de alguna mujer que hubiera tenido un papel relevante en este sentido.
Fue así cómo, consultando documentación de la época y hablando con marinos expertos, di con un personaje como el de Ana María de Soto y Alhama, que me permitió crear una historia apasionante atendiendo a los datos que pude obtener sobre su vida.
- AL: ¿Te puedes remontar a ese primer libro que leíste? ¿Y la primera historia que escribiste?
ALICIA VALLINA: No lo recuerdo con exactitud, pero posiblemente se tratase de un libro de aventuras. Recuerdo con especial cariño mis lecturas infantiles de la colección Barco de Vapor y las aventuras de Los Cinco. O los libros en los que tú mismo eras el protagonista de tu aventura y debías tomar decisiones arriesgadas pasando a una u otra página del libro dependiendo de las elecciones que realizaras.
Siempre me han encantado los cuentos, especialmente los de Oscar Wilde como sus famosos El príncipe feliz, El ruiseñor y la rosa o El gigante egoísta. Las primeras historias que escribí fueron precisamente eso, cuentos moralizantes en los que se mostrase el alma humana en situaciones excepcionales. Siempre me ha interesado el ser humano, sus pasiones, sentimientos, cómo afronta su estar en el mundo y cómo es dueño de sus miedos y de su libertad.
- AL: ¿Un escritor de cabecera? Puedes escoger más de uno y de todas las épocas.
ALICIA VALLINA: Ana María Matute es una de mis pasiones literarias desde mi juventud. Una mujer con una tremenda creatividad, emotiva, poseedora de historia bellas y únicas. También el gran Oscar Wilde, un genio preso de su tiempo y de la incomprensión con que la sociedad aniquila al diferente. Y, por supuesto, los grandes literatos rusos como Gógol, Pushkin, Tolstoi o Dostoievski. Me apasiona la literatura moralizante, de denuncia social, satírica y siempre atemporal, plena de espiritualidad y fruto de las características innatas de los seres humanos como tales.
- AL: ¿Qué personaje de un libro te hubiera gustado conocer y crear?
ALICIA VALLINA: Muchos, miles, no tendría suficientes vidas ni tiempo, ni tampoco imaginación ni capacidad suficiente para crear a los grandes personajes de la literatura universal como son para mí Alonso Quijano, el conde Drácula, Sherlock Holmes, el jorobado de Notre Dame, Alicia en el país de las Maravillas, el Principito, Frankenstein o como no, el magnífico Guillermo de Baskerville… Este último me apasiona, me hubiera encantado convertirme en su alumna, una Adso de Melk, ingenua y ávida de conocimiento, evidentemente vetado para una mujer corriente en el siglo XIV.
- AL: ¿Alguna manía o costumbre especial a la hora de escribir o leer?
ALICIA VALLINA: La verdad es que necesito un silencio total para ambas actividades. Me gusta estar concentrada y tranquila, centrada solo en la tarea que estoy llevando a cabo.
- AL: ¿Y tu sitio y momento preferido para hacerlo?
ALICIA VALLINA: El momento de más tranquilidad es siempre la noche, pero desafortunadamente del que también menos disfruto, pues al llegar más cansada del trabajo diario siempre. Mi lugar para escribir suele ser mi despacho, aunque normalmente tomo notas y apunto ideas en cualquier lugar y momento del día, en un cuaderno que siempre me acompaña o en el propio móvil, si es necesario.
- AL: ¿Hay otros géneros que te gusten?
ALICIA VALLINA: Me gusta mucho la ciencia ficción y la novela de aventuras. También los grandes clásicos de la literatura universal que nunca abandono y que de vez en cuanto siempre retomo.
- AL: ¿Qué estás leyendo ahora? ¿Y escribiendo?
ALICIA VALLINA: Estoy leyendo la novela de mi buen amigo Mario Villén titulada Ilión, una gran novela épica que adapta la Ilíada de Homero a los tiempos actuales, con una narración tremendamente brillante. Y ya estoy finalizando de escribir mi siguiente novela, también editada por Plaza & Janés.
Acabo de llegar de Ecuador para terminar la parte de documentación relativa al país que me quedaba aún pendiente. Y este verano también he estado dos semanas en Francia, en la parte del Loira, para recorrer los lugares que frecuentaron los protagonistas de esta nueva historia. Personajes reales y muy desconocidos para el gran público, pero con historias increíbles, en este caso ambientadas en el siglo XVIII, y más concretamente en la España colonial.
- AL: ¿Cómo crees que está el panorama editorial?
ALICIA VALLINA: Es un panorama muy diverso y complejo. En el caso de la novela histórica son miles de títulos los que se publican al año y el género, afortunadamente, goza de muy buena salud. A las personas nos interesa conocer el pasado para afrontar con cierto conocimiento el presente y enfrentarnos con herramientas útiles al futuro.
Pero es cierto que es complejo abrirse camino en un campo tan competitivo como la literatura. Poco a poco lo vamos logrando, gracias a los medios de comunicación, las redes sociales y a personas dedicadas a dar a conocer nuestro trabajo. Eso lo agradezco enormemente, ya que es imprescindible y es una labor tremendamente necesaria.
- AL: ¿Te está siendo difícil el momento de crisis que estamos viviendo o podrás quedarte con algo positivo tanto en el ámbito cultural como en el social?
ALICIA VALLINA: Los momentos de crisis siempre, bajo mi punto de vista, han de emplearse como catalizadores para impulsar cambios y mejoras en positivo. Las crisis, si las afrontamos con inteligencia, sentido crítico y humildad, pueden favorecer nuestro desarrollo personal, crear vínculos y redes de cooperación e impulsar actividades de aprendizaje. Eso es lo que me han traído a mí, pero siempre desde el trabajo, la voluntad de continuar esforzándome con buen ánimo y con espíritu de mejora y cooperación.
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