5 pasos para contactar con un corrector

¿Quieres saber más sobre el trabajo de un corrector? Echa un vistazo.

Uno de los procesos fundamentales e imprescindibles, y el primero, a la hora de querer publicar (tanto con editorial como en autopublicación) es el de la corrección. Yo me dedico a ello desde hace más de 10 años y reviso todo tiempo de textos, desde manuales, libros de autoayuda, poemarios, documentos técnicos u obras literarias principalmente. Pero los correctores todavía somos figuras poco conocidas, quizás por ese trabajo en la sombra y que no siempre se valora o se le da la importancia que tiene. También ocurre que muchos autores, independientes sobre todo, no tienen muy claro cómo contactar con un corrector, o no saben bien qué tipo de corrección puede necesitar su texto o qué datos dar para pedir un presupuesto. Pues aquí están estos 5 pasos para aclarar dudas.

Pero antes uno primero que es el más importante y hay que recalcarlo: cualquier escritor que se precie y quiera publicar está en la obligación de revisar su texto, tanto si es para hacer una propuesta a una editorial como para autopublicar. Y debe exigir también la corrección en cualquier editorial o servicio editorial. Si además paga por el proceso de publicación también es todavía más necesario.

Un texto puede ser muy bueno en su contenido, pero si en su forma hay faltas de ortografía, gramática o sintaxis pierde toda esa posible calidad en un momento. Y no sería la primera vez que nos hacemos con un libro, sobre todo si es autopublicado, y nos encontramos con esos errores. Lo sé por propia experiencia tanto con obras publicadas por editoriales —en especial las más modestas— o servicios editoriales.

Ahora vamos ya con esos pasos.

5 pasos para contactar con un corrector

  • Visita su web

Si la tiene, claro, aunque también hay portales, servicios editoriales o sitios literarios específicos donde informan sobre ellos. Pero es muy posible que tenga su propia web. Ahí seguro que encuentras más datos de contacto, servicios y tarifas, modos de pago y perfil profesional. Visita también sus redes sociales.

Y si contactas con editoriales (tanto si son las llamadas tradicionales o las que cobran por editar y publicar), asegúrate de que entre sus servicios está la corrección.

  • Para pedir presupuesto

El dato que necesitamos para calcular el precio por matrices (1000 matrices habitualmente) o página de corrector es el número de caracteres con espacios. Lo encuentras en tu documento de Word, en la pestaña de Herramientas y su menú desplegable donde aparece Contar palabras.

Las tarifas van en función de los textos y su estado, que también influye para el tiempo que puede requerir el trabajo de corrección. También en el caso de correcciones completas, en general, la tarifa suele ser el doble de una corrección de estilo.

  • Qué correcciones necesitas

Ortotipográficas, de estilo o ambas.

Suele haber tanto desconocimiento como confusión a la hora de distinguir o considerar qué correcciones necesita un texto. Así tenemos:

  1. la ortotipográfica, que corrige fallos gramaticales, sintácticos y ortográficos. También toca y aplica recursos tipográficos como comillas, numeración, cursivas, negritas, etc., y uniforma los criterios de su uso. Todo ajustando la ortografía a las normas de la RAE  en su última versión revisada que fue en (2010).
  1. la de estilo, que hace una mejora de la expresión, coherencia y estructuración del texto para que su lectura sea fluida y el mensaje quede más claro y se ajuste a lo que se pretende transmitir. Es también más cara que la ortotipográfica.

Muchos correctores consideran que son complementarias o no conciben una sin la otra. Es más, la de estilo puede englobar ambas siempre matizando el grado de intervención que necesite un texto. Hay veces que no se tiene más remedio que recomendar hacer las dos.

Y luego están algunos servicios especiales que pueden ser revisiones de bibliografía e índices, que se pueden acordar aparte.

  • Documentos en Word

Word es el procesador de textos más utilizado y que más se maneja en cuanto a corregir, así que es con el que solemos trabajar. También se miran PDF de vez en cuando, y Pages, el procesador de Mac, apenas se usa. De manera que no nos envíes PDF u otros formatos. Además, usamos el control de cambios (en la pestaña de Revisar) para que puedas ver las marcas y comentarios de las correcciones.

Aparte, al terminar, el corrector puede adjuntar después un informe de corrección más o menos detallado del trabajo que ha hecho.

  • Pregunta cualquier duda

Escribe o llama para cualquier duda que te surja. O comenta la corrección. Al final, es el autor quien tiene la última palabra al aceptar o rechazar los cambios que hacemos. Siempre trataremos de aclarar esas preguntas o vacilaciones o debatiremos con razones sobre esos cambios, pero insisto, es el autor quien decide sobre si dejar una tilde sin poner o una coma mal puesta. Eso sí, las dudas de sábados o domingos seguro que pueden esperar al lunes.



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